Quizás deba aprender
a dejar que las cosas pasen,
a no estar siempre detrás,
supervisando que todo ocurra
exactamente como lo soñé.
Quizás entonces se acaben
las infinitas decepciones
que me atormentan.
Quizás así,
algún día todo deje de salirme mal,
y por fin logre algo.
Creo que eso nos pasa por soñar demasiado.
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