jueves, 20 de diciembre de 2012

carta tercera

Azul silencio
Azul lejano
Azul inmenso.
Desde mi mecedora, en noches jupiterianas,
puedo ver a la Tierra, esa bola podrida
que flota en el espacio.
Desde aquí puedo ver el dolor estallar,
los gritos, las lágrimas rebalsándose...
Entonces acerco la nariz al borde de mi taza de cerámica jupiteriana,
y huelo mi té azul-júpiter.
Aquí las penas se sienten lejanas...
aún se sienten... chiquitas, tímidas... lejos
se sienten,
cada día un poco menos.


Desde Júpiter, Maruja.

martes, 6 de noviembre de 2012

Carta nº2

Júpiter es azul.
Pero no es azul como la tierra, es otro tipo de azul.
Aquí siempre es de noche. Y como el sol está tan lejos, las estrellas siempre se ven hermosas.
A veces me preparo un té y me siento en mi mecedora, en la terraza de mi casa jupiteriana, tapada con una manta azul, a mirar las estrellas y recitar poemas...
A veces pienso en ti... pero solo eres un fantasma...
Lamentablemente todavía eres.
Ojalá ya no fueras.

Hoy casi no pensé en ti.
Salí a caminar y mientras veía mis botas hundirse en la tierra azul-júpiter, me pregunté si quizás tú también piensas en mí... a veces...
O si quizás habrías encontrado a alguien más...
En verdad no quiero saber.
Eso es lo bueno de estar en Júpiter. 
Aquí no hay facebook.
Ni rumores.

Desde Júpiter, Maruja.

jueves, 18 de octubre de 2012

El país de los pelos coloridos

En este país las personas tienen el pelo del color de sus sueños. Parece que las neuronas que se activan durante los sueños, liberan una sustancia colorida que tiñe los pelos de la raíz a la punta.

Violeta nació con cuatro pelos morados; ya soñaba desde entonces.

Hoy conoció a Remigio, joven muchacho de pelos negros. Remigio tiene pesadillas en vez de sueños, y cuatro tristezas bajo la almohada.
Lo que Remigio no puede ver aún, es que en el lado derecho de su cuero cabelludo, está creciendo un mechón morado. Morado como el pelo de Violeta.

Pronto entenderá que los sueños son compatibles...
Y a veces los miedos también...

lunes, 17 de septiembre de 2012

Mi pena

Cuando muera, quiero que se sepa que amé.
Que amé intensamente.
Si bien no tuve el valor de reconocerlo;
las penas que ese amor me causó, las lloré en silencio.
Hubo veces en que quizás reclamé,
sin saber muy bien qué reclamaba.
Pero fueron arrebatos mínimos, y esa es la verdad.

Los dolores que yo misma no supe explicarme,
están adentro, mordiéndose los labios.

Y aunque no supe qué hacer con ese amor,
y aunque no hubiera sabido qué hacer con el suyo,
si él me hubiera amado también...
Quiero que se sepa que lo amé.
Que sentí un amor muy grande.

Quizás tener ese amor no me hubiera hecho feliz,
pero lo llevo conmigo, a todos lados.
Esa es mi pena.
Quiero que se sepa.

martes, 28 de agosto de 2012

Reflexión nª1 (NUESTRO PUEBLO)

"(...) Y ahí están las estrellas cruzándose por el cielo, viajando desde hace millones de años, millones de años. Los sabios todavía no se han puesto de acuerdo, pero muchos opinan que en ellas no hay seres vivos. Solo cal... o fuego. Solo este planeta se esfuerza y presiona para convertirse en algo diferente. (...)"

¿Y si somos todos iguales?

Nosotros también nos esforzamos y presionamos para convertirnos en algo diferente.
Todos los días.
Todo el tiempo.

Luchamos por ser únicos, buscamos eso que nos hace especiales. Trabajamos duro por diferenciarnos de los demás, por ser mejores. 

¿Y si somos todos iguales?
¿Y si no importa cuánto nos esforcemos o presionemos?

¿Y si no somos más que cal... o fuego?

sábado, 28 de julio de 2012

Mi espíritu patrio

Cuando era chica alguien me dijo que antes de nacer elegimos a nuestros padres. 
Esa idea se quedó dando vueltas en mi mente por mucho tiempo.
Y en algún momento llegué a asumir con total certeza que también elegimos nuestro aspecto físico, nuestra historia, el momento histórico en que nacemos, el lugar geográfico, etc.

Hoy, tantísimos años después de creer en esa especie de vida antes de la vida, he cambiado hasta volverme irreconocible. Definitivamente mis creencias no son las mismas.
Sin embargo a veces dudo. Cuando pienso quién soy, o quién hubiera querido ser, siempre concluyo que me gusta todo de mí; incluso lo que no me gusta. 

Cuando pienso en el lugar geográfico donde nací, y lo difícil que es vivir aquí a veces... cuando me imagino viviendo en otro lugar... se me rompe el corazón. Llega a mi mente una interminable lista de cosas que solo este país tiene y sin las cuales no podría vivir. Así que, sí, creo que antes de nacer elegí ser peruana. Elegí al Perú.

Lo elegí por la belleza de sus paisajes, por la diversidad de su geografía, de su gente, de su comida. Pero sobre todo por sus oportunidades; por la cantidad de cosas que hay por hacer.
Lo elegí por sus heridas, por la profundidad de sus dolores.
Por que tiene la nobleza de un animal herido que se deja curar. 
Por que guarda tantas tristezas, tantos secretos que no podemos imaginar... 
Y aún así es feliz, como yo.
Por que en las calles se siente la fuerza de la gente que está luchando, que no ha dejado de luchar nunca. 

Por que en ningún otro lugar del mundo me sentiré tan en casa como aquí. 

miércoles, 25 de julio de 2012

Nada ha cambiado.

De pronto me asaltan todos estos pensamientos que una vez me alejaron de ti.
Y vuelven los viejos dolores...
Y ahora, ¿cómo te voy a mirar?
Las cosas que quiero no han cambiado.
Y las que tú quieres tampoco...
Cómo te voy a explicar, que he vuelto... aún sabiendo...
Y que en el fondo de mi corazón, no puedo evitarlo, sigo esperando que cambien...
¿Cómo te voy a mirar, si nada ha cambiado?


viernes, 6 de julio de 2012

Se me han ido escapando las palabras
Se han ido deslindando
Una a una
De mí
Mis palabras
No regresan
Ya no las encuentro

jueves, 10 de mayo de 2012

NYC

Sueño contigo...
Me imagino caminándote, 
Casi casi puedo adivinar tus olores...
Te siento...
Soy tuya. 
Quiero ser parte de ti.
Aún no te conozco, 
Aún no te conquisto,
Pero ya sé que nos vamos a enamorar.
Loca, perdidamente. 
Ineludiblemente.
Ya te extraño...

sábado, 21 de abril de 2012

Sobre la integridad

Las lágrimas han trascendido mis cachetes, 
Ahora se deslizan entre las venas de mi cuello, 
Y golpean mi pecho con violencia.

Todo lo que queda de mí es una máscara.
Una horrible máscara.

Me mata.
Sentirme vencida por todo eso que siempre rechacé
Apasionadamente.
Sentirme aplastada por el sistema y su inmundicie.
Me mata.
No reconocer a la mujer que fui,
valiente, apasionada, llena de fe, fuerza, ilusiones, determinación...
Ahora me siento profundamente avergonzada. 
Tener trabajo no es una tragedia. 
Pero no puedo evitar sufrir...
Por el tiempo.
Y lo que me ha hecho.
Y la incertidumbre, y el terror...
El enorme terror, 
De que esto me pueda atrapar...
Y de que luego no pueda encontrar la manera 
DE SALIR DE AQUÍ.
Sufro por el abandono, la traición, la culpa...
La nostalgia de haber tenido algo que amé tanto
Y haber tenido que dejarlo luego. 
La desesperanza de que ya no sea mío.
La soledad detrás de mi máscara.
La resignación.
Saber que fui capaz de ir en contra de mis principios, 
de mis convicciones, y no saber qué otra cosa podría destruir después.
No saber de qué más podría ser capaz.
Haberme traicionado a mí misma.
Me mata.

La cruda verdad

Te sientes invencible ahora,
Pero un día conocerás la soledad, 
Conocerás el dolor de un corazón roto. 
No te has dado cuenta de que no-sentir 
Es una incapacidad, no una proeza.
Algún día entenderás que eres humano,
Y que los sentimientos no son algo de lo que puedes huir.
No puedo resentirme porque no me quieres como te quiero yo.
Tienes derecho a sentirte como realmente te sientes. 
Tienes derecho a querer las cosas que quieres. 
Y eso no es algo por lo que yo pueda resentirme o molestarme.

Pero, del mismo modo, yo no tengo la culpa de que tus decisiones me causen repulsión;
no es algo que yo haya elegido racionalmente. 
O de que me aburra la no-posibilidad, tu inacción, o tu egoismo. 
No puedes resentirte si ahora no me basta con tu flaco cariño a medias.
No puedes resentirte si decido abandonarte.
No me has dado ninguna razón para quedarme.
No hay nada aquí por lo que valga la pena hacerlo.

Desde Júpiter, Maruja.

Ud. ha excedido el límite de lágrimas llorables.

No quería terminar de llorarte una lágrima completa
Porque me parece que ya alcanzaste el límite de lágrimas llorables. 
No quería terminar de llorarte una lágrima más, 
Porque habiéndose llenado ya la cubeta, 
No tendría cómo justificar tanta condescendencia. 
Ya no me quedarían recursos para defenderte.

Hoy aprendimos una lección:
Que eventualmente tanto egoismo termina por lastimar.

No sé

No sé.
Me llenas de esperanza, 
Eso es todo.
Me da paz cuando estás cerca. 
Quizás en algún nivel, estaré siempre enamorada de ti.
No lo sé, me puedo estar equivocando.

Sacarse la mierda por ser una mejor persona

No se trata de ser amable con el taxista que no para de hablar,
O de saludar al vigilante que todos ignoran.
No se trata de darle propina a los niños de la calle,
O de cederle el paso a los peatones cuando vas manejando.
Sí, eso también. Pero no solo eso.
Se trata de exigirte cada día de tu vida.
Se trata de encerrarte en tu cuarto, aunque la soledad te resulte insoportable;
y narrarte tu vida, verla desde afuera, volver a vivirla, una y otra vez.
Tomar en cuenta cada pequeño detalle que no quieres ver, porque te hace daño.
Enfrentarte a tus demonios. Tomar decisiones difíciles.
Perderte, y encontrarte...
Escuchar eso que tanto duele. Repetirlo en voz alta.
Aprender a abrir el corazón. Aprender.
Perdonarte.
Reconocer los errores, asumirlos.
Reconocer los defectos, cambiar.
Decidir qué, por qué, para qué, cómo, con quién...
Y no desviarse de ese camino.



No es fácil.

martes, 17 de abril de 2012

lunes, 6 de febrero de 2012

Soy para ti
No lo ves?
Mírame
Estoy ahí 
Estoy aquí
Estás aquí
En este mismo pedazo de mar
En esta misma parcela de delirio.

miércoles, 11 de enero de 2012

S.I.L.E.N.C.I.O.

Despojarnos de palabras inútiles, 
Para mirarnos en silencio absoluto.
La única verdad está en tus ojos puestos sobre los míos.
Las palabras no dichas huirán
Para encontrarse a medio camino,
En un destello de luz imperceptible.